
EL EXAMEN SOBRE EL MANTENIMIENTO BÁSICO DE INSTALACIONES AGRÍCOLAS EVALÚA LAS ÚLTIMAS UNIDADES FORMATIVAS DEL CERTIFICADO DE AGRICULTURA
Los alumnos de Agricultura realizan el examen correspondiente al módulo Mantenimiento básico de instalaciones agrícolas, uno de los pilares fundamentales en la formación técnica y práctica de futuros profesionales del sector agropecuario.
Este módulo forma parte del currículo de formación profesional agraria y tiene como principal objetivo capacitar al alumnado en el correcto mantenimiento, reparación y control de las infraestructuras agrícolas más habituales, tales como sistemas de riego, instalaciones eléctricas básicas, almacenes, herramientas, cerramientos, maquinaria auxiliar y otras estructuras esenciales para el funcionamiento eficiente de una explotación agraria.
Formación clave para el futuro del campo
La formación recibida en este ámbito va más allá del conocimiento técnico: permite comprender cómo un buen mantenimiento puede significar la diferencia entre una producción rentable y sostenible, o una gestión ineficaz y costosa.
Con el avance de la tecnología agrícola y la creciente presión sobre los recursos naturales, saber cómo mantener instalaciones en condiciones óptimas se ha convertido en una competencia estratégica para el presente y futuro del sector primario.
El contenido del módulo también pone un énfasis especial en aspectos como la seguridad laboral, la eficiencia energética, y el uso responsable del agua y otros recursos, alineándose con los principios de la agricultura sostenible y el cumplimiento de las normativas ambientales vigentes.
Una formación práctica y con impacto real
Durante las semanas previas al examen, el alumnado ha trabajado tanto en el aula como en entornos prácticos, realizando tareas de inspección, detección de averías, limpieza, engrase, sustitución de piezas y aplicación de planes de mantenimiento preventivo.
Este módulo ofrece habilidades que se aplican directamente en el día a día de cualquier explotación agraria. Dotar al alumnado de esta preparación significa contribuir a la profesionalización del campo y a la mejora continua del sector.
Compromiso con el desarrollo rural
La formación agrícola desempeña un papel vital en el impulso del desarrollo rural, ya que prepara a jóvenes y adultos para responder a los desafíos actuales del campo: desde la digitalización de procesos hasta la adaptación al cambio climático y la diversificación de actividades agrarias.
El módulo de Mantenimiento básico de instalaciones agrícolas refuerza así el perfil técnico del alumnado y potencia su empleabilidad en cooperativas, explotaciones familiares, empresas de servicios agrarios y fincas productivas, así como su preparación para emprender proyectos propios en el medio rural.