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Nules es patrimonio

Museo de Medallística Enrique Giner

Villa romana de BenicatÃģ

Mascarell

Testimonios Físicos de la Guerra Civil EspaÃąola

Museo de Historia de Nules

Convento de la Sagrada Familia

Iglesia de la Sangre

Iglesia de La Inmaculada

Capilla de La Soledad

Ermita de San Miguel, “El Fort”

Ermita de San Joaquín

Conoce la historia de Nules

A pesar de que dentro del tÃĐrmino del antiguo castillo de Nules, encontramos vestigios de civilizaciones anteriores -Tosal, BenicatÃģ, Alcudia, Torre Motxa, Santa BÃĄrbara- hasta el aÃąo 1178 no tenemos documentado el topÃģnimo de esta poblaciÃģn de la Plana. El 28 de noviembre de dicho aÃąo, al redactarse el acta de dotaciÃģn de la catedral de Tortosa, se dejÃģ constancia de que “Nullis cum suis terminis” se hallaban dentro de los límites de la diÃģcesis dertusense.

  En 1238 los ÃĄrabes del castillo de Nules – actual Vila Vella – se rindieron a Jaime I y, el 16 de septiembre de 1251, el Rey Conquistador lo donÃģ al noble catalÃĄn Guillem de Montcada. Tres aÃąos mÃĄs tarde, Guillem de Montcada estando en el castillo de Onda, autorizÃģ a 37 pobladores para que en el tÃĐrmino del castillo de Nules fundasen la Pobla de Moncofa; por ese tiempo debiÃģ de autorizar a otros pobladores la fundaciÃģn de la Pobla de Nules.

 El día 20 de agosto de 1273, Jaime I concedía a Guillem RamÃģn de Montcada privilegio para traer hasta el tÃĐrmino del castillo de Nules el agua del Millars. El derecho a las aguas del Millars hizo posible la transformaciÃģn de grandes zonas del tÃĐrmino en huerta y, como consecuencia, el establecimiento de un importante grupo de pobladores.

 El 8 de octubre de 1316 el rey Jaime II confirmÃģ la venta que RamÃģn de Montcada había hechoza su yerno, Gilabert de  Centelles, del castillo y tÃĐrmino de Nules.
Gilabert de Centelles, quien es considerado Fundador de Nules, muriÃģ en las campaÃąas de CerdeÃąa. Durante la minoría de su hijo GilabertÃģ (1320-l326), se transformaron en huerta grandes extensiones del tÃĐrmino de Nules, con el consiguiente crecimiento demogrÃĄfico.

Debido a la gran influencia de Gilabert de Centelles y Montcada en la corte de Pedro el Ceremonioso, el seÃąor de Nules alcanzÃģ de dicho monarca la confirmaciÃģn del derecho de aguas y celebraciÃģn de mercado, así como el privilegio de tener un embarcadero en la playa de Nules y la celebraciÃģn de una feria anual de quince días.

Con motivo de la guerra contra Pedro el Cruel de Castilla, y el gran peligro en que se viÃģ toda la comarca de la Plana, que fue invadida por los castellanos, Pedro el Ceremonioso, en el aÃąo 1375, autorizÃģ la fortificaciÃģn de la villa de Nules.

Durante la ÃĐpoca de Martín el Humano, la villa de Nules era lugar de refugio del bando de los Centelles; por esta razÃģn el Rey la pasÃģ a jurisdicciÃģn real, aunque por poco tiempo.

DespuÃĐs de la muerte del rey Martín, los Centelles apoyaron al castellano Fernando de Antequera, siendo el seÃąor de Nules quien dirigía las tropas que, en la batalla de Morvedre, derrotaron a los partidarios de Jaume d’Urgell, dirigidos por el gobernador de Valencia.

Elegido Fernando de Antequera, en el compromiso de Caspe, los seÃąores de Nules vieron aumentar su influencia y su poder político y econÃģmico.

Durante la guerra de las Germanías, Nules fue cuartel general de las tropas realistas, pero a pesar de ser una de las poblaciones mÃĄs fortificadas de la zona, las tropas tuvieron que trasladarse a Borriana, dado que, al no tener fosos, la villa de Nules no ofrecía seguridad.

A mediados del siglo XVI, el Consell de la villa de Nules, junto con los de Moncofa, la Vila Vella y Mascarell, poblaciones que formaban la Baronía de Nules, iniciÃģ un pleito contra los condes de Oliva y seÃąores de Nules, con la finalidad de pasar a la jurisdicciÃģn real; lo cual se logrÃģ el 24 de septiembre de 1582, con la real sentencia dictada por Felipe II y por la que Nules se convertía en villa real, nombrÃĄndose un baile y un justicia reales que administraban y ostentaban el poder civil y criminal en toda la Baronia.

Con la expulsiÃģn de los moriscos, la Baronia de Nules, perdiÃģ casi la tercera parte de su poblaciÃģn y las cargas tributarias tuvieron que afrontarlas los vecinos de Nules y los nuevos pobladores. Las pÃĐrdidas que los Centelles sufrieron con la expulsiÃģn de los moriscos fueron la excusa para devolver la Baronia a la jurisdicciÃģn de sus antiguos seÃąores, con el título de Marquesado de Nules.

Durante la guerra de SucesiÃģn, Nules fue una de las pocas poblaciones del antiguo Reino de Valencia que apoyÃģ al pretendiente francÃĐs, soportando la ocupaciÃģn del ejÃĐrcito borbÃģnico; por este motivo Felipe V le concediÃģ los títulos de Muy Leal y Fidelisima y el privilegio de aÃąadir al escudo de la villa un leÃģn en campo blanco, una S y una L, y por orla que diga: La Fiel y Leal Villa de Nules. A pesar de que el documento de concesiÃģn estÃĐ conservado en el Archivo HistÃģrico de Nules, el escudo oficial que la poblaciÃģn utiliza como propio, desde 1927, no refleja fielmente dicho privilegio.

En la guerra de la Independencia, Nules fue asaltado por las tropas del general Suchet, quien dejÃģ una guarniciÃģn francesa en la antigua ermita de Sant Miquel (El Fort); durante dicha contienda jugÃģ un papel importantísimo fray Asensi Nebot, guerrillero hijo de Nules, a quien los franceses apodaban despectivamente con el nombre de “La Fraila”; ÃĐl fue quien presidiÃģ en CastellÃģn el juramento de fidelidad a la ConstituciÃģn de 1812, viÃĐndose obligado, aÃąos mÃĄs tarde, a exiliarse por defender las libertades constitucionales frente al absolutismo de Fernando VII. Hasta el siglo XIX, Nules recibía las aguas del Millars por una acequia comÚn con Borriana, esto era motivo de continuos enfrentamientos entre los dos pueblos. DespuÃĐs de largos pleitos, el 6 de septiembre de 1878, se consiguiÃģ la separaciÃģn de aguas, quedando autorizado Nules para construir una acequia propia. Este hecho y la introducciÃģn de las primeras moto-bombas, así como las importaciones de abono y las perspectivas que para la exportaciÃģn abría la “RevoluciÃģn de los Transportes” ; facilitÃģ que la parte del tÃĐrmino situada entre la villa y las montaÃąas se fuese transformando en naranjales, al tiempo que se abrían nuevos horizontes para el desarrollo industrial de la poblaciÃģn.

El Archivo Parroquial conserva la serie de “Quinqui Libri”, prÃĄcticamente completa; tambiÃĐn conserva buena parte de los libros racionales, así como la mayor parte de los protocolos notariales salvados en 1937.

El Archivo HistÃģrico de Nules guarda un importante fondo documental sobre la vida del municipio desde mediados del siglo XVI hasta inicios del siglo XX; son de destacar las secciones de “Manuals de Consell”, “AigÞes” y los expedientes de reconstrucciÃģn y derribo de murallas.