Se instalan los paneles informativos en cada una de las cinco paradas
El Ayuntamiento de Nules pone en marcha la Ruta de Testimonios Físicos de la Guerra Civil de la que forman parte cinco lugares ubicados en diferentes puntos del término municipal donde se han instalado recientemente los paneles informativos.
Ante lo cual, el alcalde de Nules, David García, explica que “con esta iniciativa queremos poner en valor el patrimonio local, que es muy diverso, de hecho con esta ruta se dá a conocer un conjunto de construcciones de gran interés relacionado con la Guerra Civil. Además, esta ruta se promociona desde la red Pueblos Mágicos de España a la que pertenece Nules desde el año pasado y que está impulsada por el Instituto de Desarrollo Local y Estudios Sociales (IDL)”.
La primera de las paradas de esta ruta son los búnkeres, que están considerados como uno de los testimonios de una de las batallas más cruentas como fue la Batalla de Levante y que por sus características arquitectónicas y dimensiones son unas de las fortificaciones de la Guerra Civil más singulares de las que se conservan en la Comunitat Valenciana.
La ruta también hace referencia al chalet del Registrador Vernia que fue el principal puesto de mando del ejército de la República en el término municipal de Nules. Actualmente esta construcción conserva toda la estructura original a excepción de la techumbre.
La conocida como zona Creu de Ferro es otra de las paradas, se trata pues de fortificaciones construidas por la 83 División Nacional.
La cuarta de las paradas son las viviendas de primera línea de la playa que fueron utilizadas como refugio durante los bombardeos en la población. Al finalizar la Guerra Civil más del 70% de las construcciones del núcleo urbano presentaban un estado de destrucción tan importante que eran inhabitables, de manera que muchas familias optaron por seguir viviendo en la población marítima mientras Regiones Devastadas reconstruía el pueblo. En la actualidad algunas de estas viviendas conservan las características de las casas de los años 20 del siglo XX, “estas viviendas presentan un aspecto peculiar e identificativo propio de nuestro poblado marítimo, precisamente estas características son las que queremos potenciar para protegerlas”, matiza García.
La última de las paradas, Regiones Devastadas, se encuentra en el casco urbano de la localidad donde se encuentran restos puntuales en algunas construcciones ubicadas, principalmente, en el conjunto de la Plaza Mayor con la Iglesia Arciprestal, el Ayuntamiento o el grupo de viviendas para funcionarios. También hay otros testimonios físicos en el mercado, el cementerio, la granja escuela, el centro escolar Lope de Vega, la casa cuartel de la Guardia Civil, o la casa de correos, entre otros.
